Rusia a punto de construir el rompehielos más potente del mundo
La nave contará con dos reactores nucleares y es el primero de una serie poderosa de buques capaces de destrozar bloques de hielo de hasta 4 metros de espesor.
Rusia refuerza su presencia en el Polo Norte con la botadura de su rompehielos de propulsión nuclear Árktika, el más potente del mundo.
En una ceremonia que tuvo lugar en los astilleros Baltiysky Zavod de la ciudad rusa de San Petersburgo fue botado el rompehielos Árktika, primer buque de la serie 22220, que estuvo en construcción desde noviembre del 2013, según publica este miércoles la agencia rusa RT.
«Con vistas a este rompehielos ya se han firmado contratos para el transporte de 18 millones de toneladas de gas licuado en el marco del proyecto Yamal GNL», declaró el jefe de la corporación nuclear Rosatom, Serguéi Kirienko.
El Árktika de más de 170 metros de largo y 34 metros de ancho y capaz de cargar 33.500 toneladas también cuenta con dos reactores, cuyo principal generador de vapor de nueva generación RITM-200, de 175 megavatios, fue diseñado especialmente para este buque.
Esta nave puede abrirse paso a todo tipo de buques, participar en operaciones de rescate y escoltar buques cisterna que transportan hidrocarburos del norte de Siberia a los mercados de Asia-Pacífico.
Los astilleros Baltiysky Zavod ya están construyendo el segundo buque de la serie, Sibir, y planean poner en quilla este año el tercero, Ural.
La región estratégica del Ártico, que puede convertirse en la mayor fuente de petróleo y gas del planeta, también es un punto de fricción entre Moscú y Washington.
Rusia argumenta la necesidad de proteger sus intereses en esta región donde tiene el grueso de sus reservas de hidrocarburos (explotables y potenciales), además de 20.000 kilómetros de frontera marítima. El viernes, botó el Iliá Muromets, un buque multifuncional que además de romper el hielo, asiste en el despliegue de tropas y cumple funciones de remolque de buques de guerra.
EE.UU. posee dos rompehielos, el pesado Polar Star, de 1976, y el mediano Cutter Healy, de 2000, un número inferior a las naves de este tipo de Rusia, motivo por el cual, militares norteamericanos llaman con regularidad la atención del Congreso a que Rusia y China intensifican la exploración de las tierras árticas, advirtiendo que EE.UU. puede quedar a la zaga.