Diputados aprueban que calles y carreteras se construyan con un 50% de material reciclado
Esta iniciativa podría ayudar a reducir de gran manera el uso del asfalto que requiere una gran cantidad de petróleo
La construcción de carreteras en nuestro país a lo largo de muchos años ha sido a base de asfalto, material que requiere directamente de petróleo y que daña de gran manera al ambiente y que también ha sido sustituido, en algunos casos, por el concreto pero que ambas sufren de un rápido deterioro.
Iniciativa legislativa brinda sus frutos
Es por eso que la Comisión de Infraestructura de la Asamblea Legislativa, en conjunto con Lanamme, tenían bajo estudio un proyecto que pretende construir nuestras calles y carreteras a base de plásticos reciclados en su composición para darles un nuevo uso y reducir la contaminación petrolera.
El proyecto se impulsó originalmente desde la bancada liberacionista, específicamente de los diputados Luis Fernando Chacón Monge y Paola Valladares Rosado, bajo el expediente 20.570, mismo que fue puesto a votación en segunda instancia esta tarde de martes y fue aprobado con 42 fotos a favor y ninguno en contra.
Nueva vida al material reciclable
Con la aprobación de la iniciativa y su futura publicación en el Diario Oficial La Gaceta, toda construcción, reconstrucción, conservación, mantenimiento y rehabilitación de calles y carreteras ejecutadas por el Estado o municipalidades deberán tener un 50% de materiales reciclados en su constitución asfáltica.
El Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales de la Universidad de Costa Rica (Lanamme-UCR) tendrá 12 meses para definir las disposiciones técnicas que dicten el tipo de materiales reutilizables que se pueden emplear en este tipo de construcciones. Su aplicación será gradual: los primeros 3 años será con un 15% de material reciclado, los siguientes 2 años con un 30% y los siguientes 5 al 50%.
Todo esto ya se ha puesto en práctica en diferentes países como Inglaterra, India y Canadá y el objetivo principal con esta iniciativa es aprovechar o darle una mejor vida a los materiales plásticos o de otro tipo que después de su uso durarían muchos años en descomponerse.