Aprobada: proyecto para frenar abusos en huelgas es una realidad y será Ley
Disolución de sindicatos, pago de salario solo a quienes trabajan y el fin de las huelgas políticas: acá le explicamos las medidas más importantes
Debido a las graves consecuencias generadas por la huelga del sector público a finales del 2018 para oponerse al plan fiscal que si fue aprobado y es Ley de la República, la opinión pública sobre las huelgas ha cambiado de cierta manera y es por ello que Carlos Ricardo Benavides, diputado Liberacionista y actual Presidente del plenario, habría impulsado desde hace varios meses el proyecto de Ley 21.049 para regular los abusos sindicales en las huelgas.
Proyecto aprobado pese a oposición sindical
Tras varias consultas constitucionales hechas por diputados opositores al proyecto, el mismo fue votado en primer debate el martes de esta semana y la mañana de este jueves fue realizado el segundo debate en el congreso en el que 35 legisladores dieron su voto positivo ante solo 13 en contra, convirtiendo la “Ley para Brindar Seguridad Jurídica y Sus Procedimientos” a las huelgas en una realidad.
A pesar de varias manifestaciones sindicales realizadas esta semana en las inmediaciones de la Asamblea Legislativa, la iniciativa viene a poner límites a muchas libertades o privilegios con las que ha contado el sector sindical desde hace muchos años en materia de protestas. Solo hace falta la firma del Presidente Carlos Alvarado y su publicación en el Diario Oficial La Gaceta para que sea Ley.
Freno y regulaciones a las huelgas
Una de las medidas propuesta en el proyecto de ley es la posible disolución de algún sindicato por orden de un juez correspondiente, en caso de que incumplan alguno de los siguientes aspectos:
- “Incitación a sus afiliados a limitar o restringir la libertad de tránsito de los ciudadanos.”
- “Incitan a sus afiliados a cometer sabotajes sobre bienes públicos”
- “Incitan a sus afiliados a llevar a cabo cualquier conducta que comporte un ilícito penal”
Además, el texto indica en el mismo artículo que “debe respetarse el derecho a la protesta y sus manifestaciones mundialmente reconocidas como concentraciones y marchas pacíficas. Sin embargo esas justas manifestaciones no deben confundirse con bloqueos ni sabotajes tipificados en la ley”. Otro de los cambios es que los sindicatos deberán avisar, sin excepción, que se irán a huelga con cinco días de anticipación a sus patronos. También quedarán prohibidas las huelgas políticas o que no tengan relación directa con el patrono, tal como pasó a finales del año anterior con el polémico plan fiscal.
Salario solo para quienes trabajen
La medida que más ha causado enojo de los sindicatos vino tras una moción en la que se suspende el contrato laboral desde el momento en el que un empleado se va a huelga, siendo así que recibirá su salario de esos días hasta que su movimiento de protesta se declare legal, de lo contrario no recibirá ese dinero.
En la iniciativa también se aclara al fin un listado de servicios esenciales que tendrán prohibido irse a huelga, tales como salud, bomberos, policías, comedores escolares, entre otros.