Abastecedor en San Ramón gana batalla legal a la compañía Nintendo por el nombre “Súper Mario”
Lo que parecía un simple trámite legal terminó convirtiéndose en una batalla inesperada para José Mario Alfaro González, un comerciante de San Ramón de Alajuela. Su intención de registrar el nombre de su abastecedor, “Súper Mario”, en el Registro Nacional, lo llevó a enfrentarse legalmente con una de las empresas de videojuegos más grandes del mundo: Nintendo of America.
El proceso, que se inició el 22 de marzo de 2024, tardó casi un año en resolverse. Sin embargo, el comerciante costarricense logró salir victorioso, obteniendo finalmente la marca para su negocio.
Una apelación inesperada
Todo comenzó cuando Alfaro presentó la solicitud para inscribir formalmente “Súper Mario” como la marca de su abastecedor. Como parte del procedimiento, el 20 de mayo de 2024, el edicto fue publicado en el diario oficial La Gaceta, lo que abrió el período para recibir oposiciones.
Poco después, Nintendo of America presentó un reclamo formal ante el Registro Nacional, argumentando que el nombre no podía ser utilizado por Alfaro, ya que “Super Mario” es una marca registrada a nivel internacional y ampliamente reconocida en la industria del entretenimiento.
La compañía japonesa indicó que el nombre ya estaba inscrito en las clases 9, 18, 25 y 28 del sistema internacional de clasificación de marcas, cubriendo productos como videojuegos, ropa, juguetes y accesorios. Nintendo sostuvo que permitir el uso de “Súper Mario” en cualquier otro ámbito podría generar confusión entre los consumidores.
Argumentos del comerciante costarricense
A pesar del peso de la empresa que tenía enfrente, José Mario Alfaro no se dio por vencido y defendió su derecho a registrar el nombre de su negocio. Explicó que su intención no era comercializar productos relacionados con videojuegos o el mundo del entretenimiento, sino inscribir la marca en la categoría 35 del registro internacional, la cual se refiere a “servicios de abastecimiento para terceros de productos de la canasta básica”.
Alfaro argumentó que no existía riesgo de confusión, ya que su actividad comercial estaba enfocada en la venta de alimentos y productos esenciales, sin ninguna relación con el ámbito tecnológico o de entretenimiento de Nintendo.
Un fallo a favor del comerciante
Tras meses de análisis y revisión legal, el Registro Nacional falló a favor del comerciante costarricense, permitiéndole utilizar el nombre “Súper Mario” para su abastecedor. De esta manera, Alfaro logró vencer a una de las empresas más influyentes del mundo, asegurando la identidad de su negocio sin infringir los derechos de la compañía japonesa.
El caso ha llamado la atención en el ámbito legal y comercial, demostrando que, aunque las grandes corporaciones poseen marcas registradas en diversas categorías, esto no significa que puedan monopolizar términos en sectores completamente distintos.
Con esta resolución, José Mario Alfaro puede continuar operando su negocio bajo el nombre que eligió, marcando un precedente en la lucha de pequeños empresarios por el reconocimiento de sus marcas frente a gigantes internacionales.