Empresarios de EE. UU. advierten pérdidas económicas por deportaciones masivas bajo Donald Trump
Las recientes deportaciones impulsadas por la administración de Donald Trump no solo han generado temor en las comunidades inmigrantes, sino que también están afectando gravemente a las industrias que dependen de la mano de obra extranjera. Empresarios de diversos sectores, incluidos la agricultura y la manufactura, han comenzado a sentir los efectos negativos de las políticas migratorias, con una baja significativa en la producción y un creciente temor a una crisis laboral aún mayor.
Impacto en la fuerza laboral: trabajadores esenciales desaparecen del mercado
La American Business Immigration Coalition, liderada por Rebeca Shi, advirtió que las deportaciones no solo afectan a los inmigrantes con antecedentes criminales, como declara el gobierno, sino que también están desplazando a trabajadores esenciales que desempeñan funciones críticas en sectores clave de la economía estadounidense. Según Shi, muchas empresas han reportado una desaceleración de hasta el 50% en sus operaciones debido a que los trabajadores, paralizados por el miedo, se abstienen de ir a trabajar.
«Trump prometió deportaciones masivas y lo está cumpliendo», expresó Shi, quien señaló que más de un millar de migrantes fueron deportados en las recientes operaciones del fin de semana.
La necesidad urgente de mano de obra en sectores clave
Sectores como la agricultura, la construcción y la atención médica están enfrentando escasez de personal debido a la falta de inmigrantes. Matt Teagarden, de la Asociación de Ganaderos de Kansas, destacó que la mano de obra extranjera es fundamental para la producción de alimentos en EE. UU.
«Podemos importar trabajadores y continuar produciendo nuestros alimentos en Estados Unidos, o podemos importar alimentos, lo que pone en riesgo nuestra seguridad nacional», afirmó Teagarden, subrayando la necesidad urgente de una reforma migratoria que permita regularizar a los trabajadores inmigrantes que cumplen con la ley y contribuyen económicamente.
Además, los inmigrantes representan entre el 25% y el 50% de la fuerza laboral en industrias esenciales, como la salud, la construcción y la manufactura. Su ausencia no solo empeorará la escasez de mano de obra, sino que podría reducir en un 4,2% el Producto Interno Bruto del país.
Los desafíos en la agricultura y el cuidado de ancianos
En la agricultura, el impacto de las deportaciones es particularmente evidente. Tony DiMare, un productor de tomates de California y Florida, afirmó que la cosecha manual, esencial para su industria, depende casi por completo de los inmigrantes, muchos de los cuales llegan a través del programa federal de trabajadores temporales.
«Los nativos no quieren hacer esa tarea», aseguró DiMare, quien destacó la dificultad de encontrar mano de obra legalizada en este sector.
Por otro lado, el sector de cuidado de ancianos, donde los inmigrantes constituyen el 80% de la fuerza laboral, también se enfrenta a serios desafíos. Adam Lampert, un ejecutivo del sector en Texas, alertó sobre la inflación en los salarios debido a la falta de trabajadores. La industria de cuidado de la salud crece rápidamente, y cada año se necesitan un millón de nuevos enfermeros, muchos de los cuales provienen de fuera de EE. UU.
Llamado a la acción: reforma migratoria como solución
Ante la creciente preocupación, los empresarios y líderes de la American Business Immigration Coalition están lanzando una campaña llamada «Asegurar nuestras fronteras, pero proteger nuestra fuerza laboral». La coalición exige una reforma migratoria bipartidista que permita a los inmigrantes cumplir con las leyes, pagar impuestos y seguir contribuyendo al crecimiento económico de EE. UU.