Fatal complicación en cirugía dental: Joven muere en cirugía de cordales: familia demanda por negligencia médica

Redacción Publicado: diciembre 17, 2024

Una tragedia sacudió a la comunidad de Spokane, Washington, cuando Erik Edge, un joven de 17 años, falleció tras sufrir complicaciones durante un procedimiento dental rutinario para extraer las muelas del juicio. El hecho ocurrió en la clínica Liberty Oral and Facial Surgery, donde la anestesia administrada habría bloqueado la garganta del paciente, impidiéndole respirar.

Una operación que debía ser sencilla

El joven Erik, estudiante de la Escuela Preparatoria Gonzaga, acudió el pasado lunes al consultorio dental acompañado por su padre, Mark Edge, quien esperaba que fuera un proceso rápido y sin complicaciones. Sin embargo, lo que parecía una intervención rutinaria se convirtió en una emergencia crítica.

Según relató Mark en una entrevista con The Spokesman-Review, mientras aguardaba en la sala, observó con angustia cómo paramédicos y bomberos irrumpían en el consultorio en un esfuerzo por salvar la vida de su hijo. A pesar de las maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) y de un traslado de emergencia a un hospital cercano, Erik no sobrevivió.

La madre del joven, Sara Edge, explicó que la muerte de su hijo fue consecuencia de una reacción adversa a la anestesia, un desenlace que considera pudo haberse evitado.

Denuncia por negligencia médica

Tras la tragedia, la familia presentó una demanda contra el cirujano oral Bryan McClelland y su clínica, argumentando negligencia médica. La demanda sostiene que McClelland actuó simultáneamente como cirujano y anestesiólogo, una práctica que, según los abogados de la familia, pudo haber comprometido la seguridad de Erik.

El abogado George Ahrend, representante legal de la familia Edge, señaló que el cirujano habría tardado varios minutos en notar que el joven no estaba respirando, lo que habría agravado la situación. Además, la demanda menciona que, al finalizar la fallida intervención, el doctor llevó consigo las pertenencias personales del joven, incluida su billetera, un acto que los padres consideran inapropiado.

Declaraciones desconcertantes

Los padres de Erik también revelaron que, durante los momentos posteriores al incidente, el Dr. McClelland insistió en detallar las cantidades exactas de medicación administradas y expresó que deseaba “poder intercambiar lugares” con el joven. Para la familia, estas declaraciones solo incrementaron su dolor y confusión en un momento tan crítico.

Un debate sobre las prácticas médicas

El caso ha puesto bajo la lupa las prácticas en procedimientos dentales donde los cirujanos asumen roles de anestesiólogos. Si bien en procedimientos menores no es inusual que un cirujano administre la anestesia, los expertos advierten que la vigilancia del paciente durante la intervención debería recaer en un profesional especializado.

La comunidad de Spokane sigue consternada por esta pérdida y el caso ha generado un llamado urgente a revisar los protocolos médicos en intervenciones consideradas “rutinarias”. La familia Edge espera que su denuncia motive a las autoridades a implementar medidas más estrictas para garantizar la seguridad de los pacientes.