Lluvias torrenciales seguirán hasta el lunes por vaguada del altura y onda tropical: ¿Qué esperar en las próximas horas?
El pronóstico para Costa Rica se mantiene con lluvias intensas y prolongadas hasta el próximo lunes, un llamado de alerta para quienes transitan las rutas nacionales y especialmente para aquellos que habitan en áreas vulnerables a deslizamientos, inundaciones o caída de árboles.
Las fuertes precipitaciones, que ya han causado estragos en gran parte del país, se deben a una combinación de fenómenos meteorológicos, según el Instituto Meteorológico Nacional (IMN).
Este complejo escenario climático surge del paso de la onda tropical número 45, una vaguada de altura en el suroeste del mar Caribe y una zona de convergencia intertropical altamente activa que sigue sobre el país.
Estos elementos están impulsando un ambiente de alta inestabilidad, generando lluvias constantes acompañadas de tormenta eléctrica, lo cual aumenta el riesgo de incidentes graves en ciertas zonas.
Hasta el momento, más de 400 personas han sido evacuadas y ubicadas en albergues en diversas regiones, entre ellas Guanacaste, Grecia, Garabito, León Cortés y Corredores, debido a la gravedad de las afectaciones en sus hogares.
Estas lluvias no solo ponen en riesgo la infraestructura, sino también la seguridad de la población, ya que en algunos puntos del país, las cuencas están alcanzando su límite de absorción, provocando inundaciones rápidas y crecidas de ríos.
A lo largo del viernes, las lluvias más intensas se registraron en el Pacífico norte, con precipitaciones de hasta 100 mm, un volumen cercano al doble de un aguacero fuerte. En el Valle Central, regiones como San José y Heredia acumularon entre 40 y 80 mm. En áreas como Tarrazú, Puerto Jiménez y Sierpe de Osa, también se han reportado lluvias considerables que están generando alertas locales. El río Reventado en Cartago y varios ríos en Guanacaste y Corredores han experimentado crecidas significativas, activando protocolos de prevención en esas áreas.
El IMN advierte que, debido a la saturación del suelo en casi todo el territorio nacional, cualquier nueva precipitación podría desencadenar desastres adicionales. La entidad insiste en que la población evite transitar por zonas inundadas y mantenga contacto con el sistema de emergencias 9-1-1 en caso de requerir ayuda.