Investigación de la UCR revela posible subdiagnóstico de covid-19 persistente
Redacción
Publicado: octubre 24, 2024
Posible subdiagnóstico de COVID-19 persistente en Costa Rica según nuevo estudio de la UCR
Una reciente investigación de la Universidad de Costa Rica (UCR) sugiere que muchos costarricenses podrían estar viviendo con síntomas de COVID-19 prolongado sin tener conocimiento de ello. Según la doctora María Gabriela Morales Scholz, investigadora del Centro de Investigación en Ciencias del Movimiento Humano (Cimohu), esta condición aún no cuenta con un diagnóstico claro, lo cual impide que las personas afectadas reciban el tratamiento adecuado.
Aunque las cifras de contagio y hospitalización han bajado, las secuelas de la enfermedad persisten en muchas personas que todavía experimentan síntomas como fatiga intensa, dificultad para concentrarse, problemas respiratorios y cambios en el sentido del gusto y el olfato. El Cimohu ha iniciado un estudio que combina pruebas de ejercicio físico y monitoreo de glucosa continua para determinar si estas alteraciones metabólicas están relacionadas con el COVID-19 persistente.
Aumentar el conocimiento sobre los efectos metabólicos del COVID-19
El equipo de investigación también estudiará otros indicadores metabólicos, como niveles de insulina y marcadores inflamatorios, con el objetivo de aportar al conocimiento sobre el COVID-19 prolongado en Costa Rica. Rodolfo Obando Monge, docente de Fisiología de la Escuela de Medicina de la UCR, indicó que la intención es visibilizar esta condición y comprender su impacto en la salud metabólica de la población costarricense.
“La mayoría de los estudios sobre COVID-19 prolongado se han llevado a cabo en países de ingresos altos. Queremos entender cuál es la situación específica en nuestra región y ayudar a quienes siguen sufriendo estos síntomas”, comentó Obando Monge.
Convocatoria de voluntarios para el estudio
Para continuar con la investigación, la UCR está buscando participantes entre los 20 y 50 años que hayan tenido COVID-19 y continúen con síntomas, pero que no realicen ejercicio regularmente. Esta investigación podría arrojar luz sobre el impacto a largo plazo de la enfermedad en la salud de la población costarricense.
