Último prófugo de la banda que robaba casas de lujo en EE.UU fue detenido: Podrían deportarlo
El sujeto formaba parte de una banda delictual junto a otros tres chilenos, y lograron adjudicarse robos por una cifra de hasta 5 millones de dólares.
El último miembro de una banda de chilenos que realizaba asaltos a casas de lujo en Estados Unidos fue arrestado este viernes, completando así la captura de todos los integrantes del grupo. Este sujeto, que se hacía pasar por argentino, había logrado escapar durante la detención de los otros tres miembros de la pandilla el pasado 12 de febrero.
La banda, conocida por la prensa estadounidense como «los chilenos del bling ring», se dedicaba a robar residencias de lujo, logrando sustraer bienes por un valor cercano a los 5 millones de dólares, aproximadamente 4.853 millones de pesos chilenos. Su modus operandi consistía en utilizar pasaportes argentinos para despistar a las autoridades y evitar ser identificados como chilenos.
Los robos que marcaron su caída
Uno de los asaltos más notorios de esta banda ocurrió el 9 de enero en el estado de Minnesota, en un barrio del condado de Hennepin. La casa asaltada pertenecía a Sarah y James Shaser, quienes estaban presentes en la residencia durante el robo. Los delincuentes sustrajeron joyas, incluyendo un anillo de bodas de 45 años que tenía un gran valor sentimental para Sarah. «Se llevaron un pedazo de mi corazón», expresó la mujer al relatar la pérdida.
Las investigaciones de la policía estadounidense apuntan a que la banda podría estar vinculada a una red de criminales que ha perpetrado más de 60 asaltos en distintas viviendas de la ciudad de Minnesota. La conexión con la banda de chilenos se fortaleció cuando, el 19 de enero, la policía arrestó a otros cuatro sospechosos en Minnesota, uno de los cuales portaba el anillo robado a Sarah Shaser.
Cargos y procesos legales
Con el arresto del último integrante, la banda de «los chilenos del bling ring» enfrenta ahora cargos de robo, que deberán ser procesados antes de que se considere la posibilidad de deportar a los implicados. La detención de estos sujetos marca el cierre de un caso que llamó la atención de las autoridades y medios estadounidenses, tanto por la organización delictiva como por los cuantiosos valores involucrados en los robos.