Con solo 38 años, se cansó de su vida y decidió irse a vivir a un geriátrico
Yang comentó que se acuesta a las 9 de la noche y se despierta muy temprano por la mañana.
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Yang comentó que se acuesta a las 9 de la noche y se despierta muy temprano por la mañana.
En un giro inesperado y sorprendente, Yang, una mujer china de 38 años, ha decidido abandonar el frenético mundo del guionismo para mudarse a un hogar para ancianos, buscando un estilo de vida más sereno y en contacto con la naturaleza. Esta decisión ha captado la atención de los medios y ha suscitado un amplio interés, dado que Yang, ex guionista de cine y televisión, ha optado por un entorno que, tradicionalmente, se asocia con personas de edad avanzada.
Tras más de una década inmersa en un trabajo altamente demandante y estresante, Yang sintió que su bienestar mental estaba en juego. En busca de alivio, consultó a varios médicos sobre cómo un cambio drástico en su estilo de vida podría influir en su salud. La respuesta, que la alentó a seguir adelante con su plan, fue un claro indicio de que el descanso y la simplicidad podrían ser la clave para su recuperación.
En una entrevista con ‘6Park News’, Yang explicó que su decisión de mudarse a una residencia para ancianos, en lugar de optar por un hotel o una opción similar, se basó en dos razones principales. Primero, su curiosidad sobre la vida en un hogar para ancianos la llevó a querer experimentar de primera mano cómo era vivir en ese entorno. En segundo lugar, buscaba un lugar que le ofreciera descanso, atención médica básica y una dieta saludable, factores que consideró cruciales para su recuperación.
“Elegí una residencia de ancianos porque, a diferencia de un hotel, aquí encontré un lugar que se ajusta perfectamente a mis necesidades”, dijo Yang. “En estos hogares, los residentes se acuestan temprano, tienen comidas ligeras y saludables, y acceso a cuidados médicos básicos. Todo eso encajaba con lo que necesitaba en este momento de mi vida”.
En su nuevo hogar, Yang ha encontrado un ritmo de vida que le ha permitido mejorar significativamente su bienestar. Se acuesta a las 9 de la noche y se despierta temprano, y ha encontrado tiempo para actividades que disfruta, como leer, escribir novelas y ayudar a otros a redactar memorias. También ha comenzado a hacer videos para TikTok y a realizar ejercicios matutinos al aire libre cuando el clima lo permite.
El centro donde Yang reside, Yisenlin, en el distrito de Fengman, Jilin, hizo una excepción para recibirla, dado que normalmente los hogares para ancianos están destinados a personas de mayor edad. Sin embargo, el cambio de ambiente ha tenido un impacto positivo en su salud, ayudándola a superar una depresión y recuperarse de una enfermedad.
Yang destaca que su nuevo estilo de vida ha mejorado su calidad de sueño, algo que antes se veía afectado por el estrés y las largas horas de trabajo. “El ritmo aquí es completamente diferente. Antes, solía estar ocupada hasta tarde y frecuentemente tenía pesadillas. Ahora, duermo profundamente y sin pesadillas”, comentó.
La historia de Yang ha resonado en todo el mundo, mostrando que a veces un cambio radical puede ser la solución para dejar atrás el estrés y encontrar una vida más equilibrada y saludable. Su experiencia está inspirando a muchos a reconsiderar sus propias vidas y explorar opciones alternativas para mejorar su bienestar.