Enfermera sufre paro cardíaco y queda tetrapléjica; su jefa prefirió grabar antes de ayudarle
Una mujer en labores de enfermería resultó con un trágico desenlace cuando sus compañeros decidieron ayudarla tiempo después.
Una mujer llamada Andrea Morris realizaba su turno como enfermera en una unidad de oncología, todo marchaba con normalidad cuando inesperadamente sufrió un paro cardiaco y terminó por quedar tetrapléjica.
Al parecer su jefa decidió grabarla en vez de brindarle ayuda; los hechos ocurrieron en el centro de atención médica City of Hope en Upland; esto desencadenó que la enfermera sufriera graves consecuencias tras esos 7 minutos de espera.
De acuerdo con medios locales, la jefa de Morris llamó al 911 para pedir apoyo y emergencias, pero mientras hacía esto comenzó a grabar a la mujer quien claramente sufría severo dolor y luchaba por conseguir respirar.
Las inquietantes imágenes de la enfermera sufrieron un paro cardiaco fueron difundidas en internet y muestran que su jefa -identificada como Karen Serna- no brindó los primeros auxilios para contener la situación.
Por el contrario comunicó erróneamente que Morris sufría una convulsión, a la par de grabarla; de manera que fueron 7 minutos donde la joven madre de 3 hijos padeció fuertes dolores y complicaciones para respirar.
¿Hubo negligencia?
Esto -dijeron los abogados de la enfermera- provocaron que terminara en una silla de ruedas, con necesidad de ayuda las 24 horas del día por el resto de su vida; lo cual ya no le permite hacerse cargo de sus hijos.
“Había un desfibrilador muy cerca, oxígeno muy cerca y simplemente no reaccionaron. Es el mayor misterio de todo el asunto. Estaba muriendo, sus labios se volvieron azules y luego morados. Da mucho miedo pensar que tu jefa te grabará sufriendo un paro cardíaco y respirando agónicamente en lugar de reaccionar y aplicar RCP”, acusó Pam Bertin, hermana de Morris, a NBC Los Ángeles.
Morris logró sobrevivir porque su compañera Alma Harris acudió en su ayuda, pero tristemente tardó en llegar 7 minutos y fue en ese momento cuando comenzó los trabajos de reanimación.
El incidente fue en 2020 cuando reportó a su jefa que tenía síntomas relacionados al covid. Ahora están en busca de una compensación pues las cuentas anuales de manutención superan los 200 mil dólares, es decir, 103 millones de colones.
Morris actualmente no puede tomar un sorbo de agua sin ayuda; su familia tuvo que abrir una página en GoFundMe para ayudarse con los gastos, incluso tuvieron que vender la casa de la enfermera para liquidar deudas y ya vive con sus padres.