¿Qué es el síndrome de la fatiga crónica? Aquí los síntomas y por qué el aumento de casos
¿Sientes que vives con cansancio? Puede tratarse del síndrome de fatiga crónica, conoce sus síntomas aquí.
Sentir fatiga constante puede ser más que simplemente cansancio; podría ser un signo del síndrome de fatiga crónica (SFC), una condición compleja que afecta tanto física como mentalmente. El SFC, también conocido como encefalomielitis miálgica (EM), es una enfermedad multisistémica que se manifiesta con fatiga significativa, afectando la capacidad de las personas para llevar a cabo sus actividades diarias.
Según un estudio reciente publicado en el Journal of Clinical Medicine, aproximadamente el 25% de los pacientes con EM/SFC se encuentran postrados en cama, y el 60% no puede trabajar a tiempo completo. Esta enfermedad se considera parte de los síndromes sensitivos centrales (SSC), que incluyen condiciones como la fibromialgia, con la que a menudo coexiste.
Los síntomas del SFC son diversos y pueden variar de persona a persona. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) identifican varios síntomas comunes, destacando tres factores principales:
1. Reducción significativa en la capacidad para realizar actividades habituales antes de la enfermedad, persistente durante seis meses o más, y que no mejora con el descanso.
2. Malestar post-esfuerzo, caracterizado por un colapso o crisis que puede durar días o semanas, dejando a los pacientes postrados en cama.
3. Problemas para dormir, que incluyen dificultad para conciliar el sueño y una sensación de falta de descanso, incluso después de dormir toda la noche.
Otros síntomas que pueden experimentar los pacientes con SFC incluyen dificultades cognitivas, como problemas de memoria y concentración, así como dolores musculares, dolores de cabeza, problemas digestivos y síntomas similares a los de la gripe, como escalofríos y sudores nocturnos.
El SFC puede afectar a personas de todas las edades, pero se observa con mayor frecuencia en personas jóvenes, especialmente en mujeres. La fatiga intensa y persistente que caracteriza al SFC puede generar una gran frustración en los pacientes, ya que no mejora significativamente con el descanso, lo que afecta su calidad de vida y su capacidad para realizar actividades cotidianas.