¿Qué es el Gran Anillo, la gigantesca estructura cósmica que ‘no debería existir’ en el universo?
Se encuentra demasiado lejos para ser visible y su sola existencia pone de cabeza un principio básico de la astronomía.
Entre la constelación del Boyero y la estrella Alkaid en la constelación de la Osa Mayor, a miles de millones de años luz de distancia, existe una estructura cósmica con aparente forma de sortija cuyas dimensiones desafían nuestra comprensión del universo.
Se le conoce como el Gran Anillo (The Big Ring, en inglés) y es un supercúmulo galáctico, una aglomeración de cientos de miles de galaxias que se extiende por unos 1.300 millones de años de luz de un extremo a otro.
Si su dimensión te resulta incomprensible de imaginar, entonces solo piensa que, si esta estructura fuese visible en el cielo nocturno, entonces tendría 15 veces el tamaño de la Luna vista desde la superficie.
Sin embargo, existe un problema. Los cosmólogos —astrónomos que estudian la evolución del universo— consideran que el Gran Anillo no debería existir por una razón: su gran tamaño desafía el principio cosmológico.
¿Por qué desafía el principio cosmológico?
Según el principio cosmológico, la materia se debe encontrar distribuida de manera uniforme en todo el universo, de tal manera que cuando lo veamos a grandes escala, este tendría que tener el mismo aspecto homogéneo sin importar la dirección en que lo observemos.
Sin embargo, en los últimos años, diversos expertos han descubierto, estudiando el cosmos, estructuras tan gigantescas que desafían este famoso postulado
Ejemplos de ellos son la Gran Muralla de Hércules-Corona Boreal, con una longitud de 10 billones de años luz; la Gran Muralla Sloan, con 1.500 millones de años luz, o el Muro del Polo Sur, con 1.400 millones de años luz, y otros más.
«Los cosmólogos calculan que el límite de tamaño teórico actual de las estructuras es de 1.200 millones de años luz», sostuvo Alexia López, estudiante de doctorado de la Universidad de Lancshaire Central (UCLan) que identificó el Gran Anillo.
Parte de una estructura aún más inmensa
Según Don Pollaco, físico de la Universidad de Warwick (Inglaterra), en entrevista a la BBC, puede que el Gran Anillo en realidad sea parte de una estructura muchísimo más grande, en conjunto con el Gran Arco, otro gigantesco supercúmulo galáctico muy cercano que también fue descubierto por Alexia López hace unos años.
El Gran Arco (the Giant Arc), tres veces más grande que el Gran Anillo, se encuentran el mismo tiempo cósmico y en el cielo están separados por solo 12 grados (medio grado es el ancho de la Luna).
“El Gran Anillo y el Gran Arco, tanto individualmente como juntos, nos plantean un gran misterio mientras trabajamos para entender el universo y su desarrollo”, señaló López.