Banda en San Carlos desfiló como ‘La Casa de Papel’ y hasta entonaron ‘Bella Ciao’
Años atrás el MEP había prohibido temas como «Despacito» por no ser propios de nuestra cultura.
Dylan Gomez
Publicado: septiembre 15, 2019
Este 15 de setiembre Costa Rica y toda Centroamérica viven una gran fiesta al celebrar 198 años de independencia y soberanía, años marcados por grandes historias qué contar en un país que sigue buscando el desarrollo sin ejercito y con la educación como su principal arma, más allá de las coyunturas sociales que se viven en la actualidad.
Como es la costumbre desde hace décadas, la mañana de este 15 de septiembre se llevaron acabo los tradicionales desfiles de independencia, comandados por niños y adolescentes de escuelas y colegios a lo largo del territorio nacional, en medio de una nublada mañana con la presencia de miles de personas que se apersonaban a presenciar los actos culturales.
Desfile de independencia con alusión española
Sin embargo, los desfiles en la Fortuna de San Carlos estuvieron envueltos por la polémica luego de que una de las bandas participantes (de momento se desconoce si pertenecen a algún centro educativo público o privado), desfilaron vestidos con los icónicos kimonos de la popular serie “La Casa de Papel”, incluyendo las populares máscaras.
KYCn, en San Carlos una banda se vistió de La Casa de Papel y tocó Bella Ciao nsgfjrndjdbbdndjf pic.twitter.com/1kGJjZu7rV
— Cuidado con María (@lacleptomana) September 15, 2019
Como si fuese poco, en medio de las dudas y aplausos de los presentes, entonaron la canción “Bella Ciao”, misma que se volvió muy popular al ser el tema referente a la serie de Netflix que ya lleva 2 temporadas y ha sido un éxito a nivel mundial desde su estreno en 2017.
Ya existen precedentes con este tipo de actos
En el 2017, cuando la canción “Despacito” de Luis Fonsi con Daddy Yankee estaba sonando a nivel mundial como el sencillo más escuchado en la historia de las plataformas digitales, el Ministerio de Educación Pública había emitido el decreto 32.609, mediante el cual prohibió a los centros educativos entonar la popular canción de reggaeton y los obligó a tocar temas estrictamente “tradicionales costarricenses o hispanos”.
