Ascienden a 9 700 los muertos en Gaza por los ataques israelíes, incluidos 4 000 menores
El Ministerio de Sanidad gazatí señaló que han recibido 2 260 informes de personas desaparecidas, ‘incluyendo 1 270 niños que aún se encuentran bajo los escombros’.
Más de 9 700 personas han muerto y 24 800 han resultado heridas en la Franja de Gaza por los bombardeos de Israel desde que comenzó la guerra con Hamás, el pasado 7 de octubre, según informó este domingo el Ministerio de Sanidad gazatí, que detalló que 4 008 de los fallecidos son menores.
El portavoz de Sanidad, Ashraf al Qudra, dijo en una rueda de prensa que entre los 9 770 fallecidos hay también 2 550 mujeres, 596 ancianos y 175 profesionales sanitarios.
Al Qudra advirtió además que el ministerio ha recibido 2 260 informes de personas desaparecidas, «incluyendo 1 270 niños que aún se encuentran bajo los escombros».
Por otra parte, denunció que Israel «atacó deliberadamente 110 instituciones de salud» y alertó sobre el inminente colapso del sistema sanitario de Gaza producto del endurecimiento del asedio israelí sobre el enclave.
Desplazamiento forzado
El anuncio hoy de la nueva cifra de fallecidos desde el comienzo de la guerra llega poco después de que el Ministerio de Sanidad gazatí comunicara que 47 personas habían fallecido en un ataque israelí contra el campamento de refugiados de Al Magazi ocurrido esta madrugada.
Desde el 7 de octubre, cuando Hamás perpetró un ataque que dejó más de 1.400 muertos (la mayoría civiles), 5.400 heridos y al menos 241 secuestrados en Gaza e Israel reaccionó declarándole la guerra al grupo islamista, el número de muertos palestinos aumenta día tras día.
Tras una primera ofensiva de incesantes bombardeos contra el enclave, Israel lanzó el 27 de octubre una incursión por tierra que avanzó hasta la ciudad de Gaza, principal urbe de la Franja.
La ofensiva militar de Israel sobre el enclave palestino ha dejado además unos 1,5 millones de desplazados, quienes padecen condiciones de vida extremadamente difíciles por el colapso de los hospitales y la grave escasez de agua potable, alimentos, medicinas, electricidad y combustible.