Por primera vez un vídeo muestra cómo los reos operan un ‘’call center’’ desde La Reforma
Un vídeo grabado por un reo, muestra cómo los privados de libertad tienen toda la logística preparada, para estafar a sus víctimas.
Estar privados de libertad no es excusa para un grupo de hombres que operan toda una organización, para realizar estafas por llamadas telefónicas.
Contrario a lo que se pueda pensar, esta organización de privados de libertad investiga a sus víctimas desde las prisiones, gracias a la tecnología de punta con que cuentan los teléfonos de última generación, que en los centros penales llegan a cotizarse hasta en ¢800.000 y ¢1 millón.
Ellos ingresan a todo tipo de información de las personas y las indagan en el Registro Civil, el Registro de la Propiedad, buscan los datos y analizan cómo realizar la estafa y qué les conviene más.
En la cárcel la Reforma son conocidos como ‘los cazadores’, que a través de los dispositivos electrónicos buscan la información y realizan el fraude.
Desde prisión, el grupo criminal logra llevar a cabo todo tipo de transacciones bancarias, ya sea sustracción de montos con información de las cuentas, pago de sobornos o eventuales secuestros de las víctimas.
Solo en el 2018, la Policía Penitenciaria reportó 2.946 celulares decomisados en las prisiones.
En la primera mitad del 2019, esta cifra llega 1.191. Además, el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) estimó que las víctimas de estafas telefónicas perdieron ¢2.741 millones entre julio del 2017 y este mismo mes del 2018.
Vídeo muestra cómo suceden las cosas
Un vídeo grabado por un privado de libertad de la Reforma, muestra cómo operan ‘los cazadores’.
Los reos dedicados a las extorsiones y los fraudes tienen una agenda diaria, donde apuntan las llamadas pendientes y los ‘clientes‘ a los que deben darles seguimiento.
Por esa misma vía tambien abren un expediente de cada víctima para establecer los recursos económicos con que cuenta, su grado de liquidez y movimientos bancarios.
Bloqueo de señal
Las operadoras telefónicas tendrán hasta abril del 2020 para bloquear la señal de celulares en las 20 cárceles del país.
El plazo lo define el proyecto de ley para evitar estafas telefónicas desde los centros penales, aprobado en agosto del 2018.
La nueva legislación señala que, una vez publicado su reglamento, las empresas tienen nueve meses para aplicar los bloqueos.