Chofer de plataforma cuenta como asesinos de Marco Calzada se burlaban de su muerte
“Mae, vieras que feo hacía, vieras cómo se estaba ahogando y se tiró”, dijo uno de los sospechosos.
Las palabras crueles, acompañadas de risas burlonas, aún resuenan en la mente de Byron Mora Valverde, un conductor de plataformas digitales que se encontró con una experiencia perturbadora al prestar un servicio a tres jóvenes, quienes posteriormente resultaron ser los acusados del asesinato del estudiante universitario Marco Calzada Valverde.
Byron brindó estos escalofriantes detalles durante la continuación del juicio relacionado con la muerte del joven.
Según su testimonio, la noche del 2 de julio de 2020, mientras se encontraba cerca del barrio Chino en San José, observó una sábana blanca que cubría a una persona, indicando así la existencia de un crimen. Además, notó la presencia de tres jóvenes sentados en la acera, en las inmediaciones del lugar.
A pesar de este encuentro, Byron continuó desempeñándose como conductor de plataformas digitales. Fue entre las 2 a.m. y las 4 a.m. del domingo 3 de julio cuando recibió una solicitud para otro servicio de taxi informal, esta vez desde San Pedro de Montes de Oca hasta Cartago.
Al llegar al lugar, se sorprendió al darse cuenta de que los pasajeros eran los mismos jóvenes que había visto minutos antes, sentados en la acera donde se había producido el crimen.
Durante el trayecto, mientras se dirigían hacia La Galera, Byron les hizo preguntas sobre el ambiente en el bar. Los jóvenes respondieron que no pudieron ingresar debido a un problema causado por uno de sus amigos.
«Les pregunté: ‘¿Cómo estaba el bar?, ¿cómo era el ambiente?’. Uno de ellos, un hombre con un tatuaje en el cuello, me dijo que no pudieron ingresar porque su amigo se había metido en una pelea», testificó Byron.
Después, relató que uno de los amigos, quien resultó ser menor de edad, había apuñalado en la garganta a otro joven.
«Cuando me contaron que le habían apuñalado en la garganta, ellos se rieron de manera despectiva y dijeron: ‘Mira, fue realmente horrible, podrías haber visto cómo se retorcía y se asfixiaba antes de caer'».
En ese instante, Byron sintió que su vida estaba en peligro y decidió llamar a un compañero para averiguar su ubicación. Su compañero le informó que se había quedado sin gasolina en el centro de San José. Ante esta oportunidad, Byron aprovechó para decirle a su compañero que le enviaría su ubicación en tiempo real.
Después de escuchar esta confesión aterradora, el miedo se apoderó de Byron, incluso llegó a preguntar a los tres jóvenes si planeaban hacerle daño, a lo que ellos respondieron negativamente. Uno de ellos incluso mencionó que había proporcionado un arma al menor de edad, quien había apuñalado a Marco Calzada, para cometer un robo en un supermercado chino.
Finalmente, los jóvenes se bajaron del vehículo sin pagar el servicio.