Cuándo y cómo ver a Andrómeda, la galaxia que chocará con la Vía Láctea
La inmensa galaxia ya se puede captar en el cielo y no hace falta telescopios para divisarla. Conoce las fechas y sigue estas recomendaciones para verla.
La Vía Láctea y su vecina que la duplica en tamaño, Andrómeda, están en curso de colisión. Ambas se acercan entre sí a una velocidad de 113 kilómetros por segundo debido a la atracción gravitatoria. Pese a que se espera que se fusionen dentro de 4.500 millones de años, sus capas más externas ya han comenzado a chocar.
Mientras tanto, las personas en la Tierra tenemos la oportunidad de observar a simple vista a Andrómeda, también conocida como Messier 31. Desde mediados de agosto hasta noviembre, la galaxia espiral aparece en el cielo nocturno de los dos hemisferios de nuestro planeta.
A pesar de estar ubicada a 2.5 millones de años luz de distancia, tan solo la parte central de Andrómeda ocupa en el cielo un cuarto de grado. Esto equivale a la mitad del ancho de una luna llena, según la NASA.
¿Cuándo y dónde se podrá ver a la galaxia Andrómeda?
Debido a su lejanía, Andrómeda tiene un brillo difuso. Por ello, para captarla a simple vista no basta con tener un cielo despejado, sino también que haya ausencia de brillo lunar y poca luz en la superficie.
Por esa razón, aunque la galaxia ya aparece en el cielo en estas fechas, lo más indicado es observarla en las noches cercanas a la fase de luna nueva. En agosto, esta etapa llegó en la última semana del mes (del 25 al 31 de agosto). El próximo periodo de máxima oscuridad será entre el 21 y 27 de setiembre.
Asimismo, se debe buscar un lugar con poca contaminación lumínica, como en los exteriores de las ciudades o en zonas rurales.
¿Cómo ubicar a Andrómeda en el cielo?
En esta época de año, la galaxia aparece sobre el horizonte, en dirección noreste, alrededor de las 11 p. m. en Perú y otros países del hemisferio sur (Argentina, Chile, etc.), y dos horas antes en el hemisferio norte (México, España, etc.).
Se ubica junto a la constelación de Andrómeda —de ahí su nombre—, justo a la altura del ‘cinturón’ del personaje. En tanto, la constelación de Pegaso, caracterizada por tener un cuadrilátero formado por sus estrellas, puede servir de guía para ubicar la galaxia.
El mejor momento para ver a Andrómeda se da entre la 1.00 a. m. y 2.00 a. m., cuando se ubica sobre el norte (como en la segunda imagen), en un punto más elevado del cielo.
A simple vista lucirá como una mancha elíptica, con el aspecto de una pequeña y débil nube. Pero si se usa binoculares, se podrá ver claramente la majestuosidad de esta galaxia vecina, que alberga aproximadamente un billón de estrellas, 10 veces más que la Vía Láctea.
Hasta ese punto, lo que verá es solo la parte más brillante de la galaxia, su núcleo. Para apreciar su tamaño completo (el ancho de seis lunas llenas en el cielo), que incluye sus brazos espirales, se necesitará por lo menos un telescopio pequeño.
Andrómeda tiene una magnitud aparente de 3,5 (mientras más bajo el número, más brillante). Esto significa que es más notoria que la mayoría de estrellas visibles en un cielo oscuro y despejado (magnitudes de 4 a 6), pero menos evidente que los planetas observables a simple vista (magnitudes de 1 a menos de 0).
Por ese motivo, los expertos en observación astronómica recomiendan que toda persona que decida aventurarse a la búsqueda de Andrómeda o cualquier otro objeto del espacio profundo, previamente debe acostumbrar la vista a la oscuridad del cielo.