‘Todo en todas partes al mismo tiempo’: cinta destruye a Marvel con ridiculez y corazón
¡La película del año! Ni Doctor Strange y su “multiverso de la locura” ni Marvel con sus millones podrían superar esta obra maestra de los ‘Daniels’ y A24
“Todo en todas partes al mismo tiempo” es lo que cualquier fanático de Marvel hubiese querido ver en el cine cuando compraron sus boletos para “Doctor Strange en el multiverso de la locura”: un verdadero viaje bestial y emotivo. Los directores Dan Kwan y Daniel Scheinert le dan una lección a Sam Raimi y ejecutan el concepto de los múltiples universos de manera tan excepcional que logran hacer la mejor película del año.
Convertida recientemente en el filme más taquillero de la historia de A24, es definitivamente algo que se debe presenciar en la pantalla grande.
¿De qué trata “Todo en todas partes al mismo tiempo”?
La cinta sigue a Evelyn Wang (Michelle Yeoh), una mujer chino-estadounidense que intenta pagar sus enormes deudas en impuestos. Su vida cambia por completo cuando descubre que tiene el poder de existir en diferentes universos paralelos y que es la única que puede parar una enorme destrucción multiversal.
Tuve la oportunidad de verla en su primer día en la cartelera peruana y no exagero cuando digo que es algo enorme y emocionante. Me reí a montones, me conmoví hasta las lágrimas y regresé a casa con una profunda reflexión.
“Capítulo 1: Todo”: el verdadero multiverso
¿Qué hay más allá de nuestro universo?, ¿realmente existen versiones alternas de nosotros que vivieron otras vidas? Con preguntas tan profundas como estas podrían venirnos a la mente películas como “2001: Odisea del espacio”, “Interestelar” o “Matrix”.
“Todo en todas partes al mismo tiempo” le da la vuelta al pastel y se aleja por completo de los dramas espaciales o de la repetitiva ciencia ficción del cine de superhéroes.
Si el multiverso es precisamente un infinito azar de posibilidades, es lógico que algunos de esos universos sean completamente ridículos. Así, los directores empujan sin miedo la trama dándole a lo absurdo una coherencia sumamente divertida.
Una dona gigante que representa a “la nada”, peleas donde se usan dildos como armas, una profunda discusión entre dos rocas, un mundo donde la gente se besa usando sus dedos de salchicha, un mapache que parodia a “Ratatouille”. Todas estas son solo algunas locuras que presenta la película.
¿El resultado? Un caos fílmico que no se desborda en su ejecución, sino que entretiene de inicio a fin: un verdadero multiverso.
“Capítulo 2: En todas partes”: un profundo drama familiar
No todo es locura. “Todo en todas partes al mismo tiempo” también es una invitación a varias reflexiones que pueden variar según cada espectador. Puede ser un viaje de autodescubrimiento, una crítica a las relaciones familiares tóxicas, un mensaje sobre la humanidad, un relato sobre el consumismony más.
En mi caso, prefiero verla como un profundo drama familiar. Hay muchos mensajes, pero todos los aprendemos desde la protagonista Evelyn Wang y las diferencias que tiene con cada miembro de su familia.
La ingenuidad y fragilidad de su esposo; la rectitud y exigencia de su padre; y la incomprensión y diferencia generacional con su hija. Todo esto hace que Wang desee dejarlo todo y se pregunte a sí misma a lo largo del filme: “¿qué hubiera pasado si hubiese hecho esto en vez de aquello?” (algo que todos nos hemos cuestionado alguna vez).
Pero los ‘Daniels’ resuelven esta pregunta haciéndonos entender que dicha fantasía solo es una cuestión de ego dañina tanto para nosotros mismos como para quienes nos rodean.
La solución no está en lanzarse al vacío y creer que en realidad nada importa, sino en seguir luchando por los demás (y uno mismo) a pesar de lo difícil que pueda ser.
Así, Evelyn aprende que las diferencias no tienen por qué ser un obstáculo, sino que pueden llegar a ser un enriquecimiento intelectual y sentimental para acercarnos más como individuos. Solo basta con abrir nuestra mente (y nuestros ojos) para aprender del otro.
De esa manera, la protagonista abraza las diferencias que tiene con sus seres queridos y consigue vencer la maldad con el valor más trascendental de la historia del ser humano: el amor.
“Capítulo 3: Al mismo tiempo”: un universo para cada uno
“Todo en todas partes al mismo tiempo” es una película que puede tener diferentes lecturas para cada espectador, algo que enriquece y le da sentido a la palabra “multiverso”. Hay comedia negra, romance, drama, ciencia ficción, artes marciales y muchos más.
Los ‘Daniels’ hacen un trabajo original con efectos visuales prácticos, una fotografía preciosa digna de un Oscar y un guion excelente que sostiene bien la historia; un ejemplo de que aún se puede hacer buen cine sin recurrir a precuelas, secuelas o remakes.