Iglesia Católica se opone a venta de píldora del día después
La Iglesia católica de Costa Rica objeta que la píldora atenta contra la vida humana y lesiona el derecho de los no nacidos.
Este pasado jueves, luego de que se aprobara la comercialización de la píldora del día después, la Iglesia Católica costarricense comunicó que se opone a la venta del fármaco, pues considera que atenta contra la vida de los no nacidos.
“Respecto a la “anticoncepción de emergencia”, es importante considerar que diversos científicos han afirmado que la misma puede impedir la implantación del cigoto en el endometrio (efecto anti-implantatorio o aborto pre-implantatorio). Esta posibilidad real de la “anticoncepción de emergencia” hace que nuestra valoración sobre la misma sea negativa, por atentar contra la vida de los más vulnerables, los no nacidos”, se lee en el comunicado.
Además aseguran que la solución a los problemas se encuentra en tutelar los derechos humanos básicos y no en eliminar la vida de los más indefensos.
“La Iglesia quiere acompañar a esas mujeres y sus hijos, mostrarles la grandeza del amor de Dios, Señor de la vida, y proponer a toda persona de buena voluntad, que la solución a las dificultades no está en eliminar la vida de los más indefensos, sino en tutelar los derechos humanos básicos, empezando por el derecho a la vida y continuando con los derechos a un trabajo digno, a la educación, a la salud y a la seguridad a las mujeres y sus hijos”, añadieron.
La reacción de la Iglesia Católica se da luego de que el Ministerio de Salud informara sobre la aprobación del registro sanitario del medicamento Levonorgestrel, conocido popularmente como la “píldora del día después”.
Según la Organización Mundial de Salud (OMS)
“Las píldoras anticonceptivas de urgencia impiden el embarazo al evitar o retrasar la ovulación y no pueden provocar un aborto. Los DIU de cobre (otro de los métodos) impiden la fertilización al provocar un cambio químico en el espermatozoide y el óvulo antes de que lleguen a unirse. La anticoncepción de urgencia no puede interrumpir un embarazo establecido ni dañar al embrión en desarrollo”.
También la OMS indicó que este anticonceptivo de emergencia es un método seguro y efectivo si se usa en el momento adecuado.