«Las cosas por limpiar»: La inspiradora historia real detrás de la serie que es un éxito en Netflix
La producción de a poco ha ido destronando a la popular serie coreana «El juego del calamar»
«Las cosas por limpiar» («Maid» por su nombre en inglés) figura dentro del top 10 de las producciones más vistas en Netflix. De hecho, en Chile ha permanecido en el segundo lugar, antecedida solo por «El juego del calamar».
La serie -que tiene como foco mostrar la vida de una madre soltera que hace todo lo posible por sacar adelante a su hija- cuenta con la destacada actuación de Margaret Qualley y una narrativa altamente emocional, es tan sencilla como sorprendente.
La producción no es completamente ficción, ya que es una historia basada en la vida real que cuenta la cruda realidad que atravesó la autora, Stephanie Land, quien escribió sus memorias en el libro «Maid: Hard Work, Low Pay, and a Mother’s Will to Survive».
Fue tal el éxito de su libro, que decidió llevarlo a la pantalla chica de la mano de Margot Robbie («Birds of Prey»; «I, Tonya») y John Wells («E.R»., «Shameless»), quienes figuran como productores de la serie.
«No sabía que el libro sería un éxito de ventas o que algún día inspiraría una serie de Netflix. Solo necesitaba el dinero. Era una madre soltera con un niño de 2 años y un niño de 9 años, vivía en una casa para personas de bajos ingresos y, debido a un cheque de pago atrasado, no había comido mucho durante algunas semanas, subsistiendo con la pizza que pagaba», escribió la autora para la revista Time, testimonio que sirve para recapitular su vida.
Antes de convertirse en la exitosa escritora que es hoy, Stephanie quedó embarazada a los 28 años, producto de una relación compleja con un hombre con el que estuvo saliendo durante cuatro meses.
Maltratada en su relación y con una madre con trastorno de bipolaridad, decidió ir en búsqueda de su padre quien al pasar el tiempo también se torna violento.
Al verse sin ahorros (porque se los gastó su pareja), Land se independizó y se fue a buscar un mejor lugar para vivir con su hijo. Encontró un trabajo en servicios de limpieza, en donde cobraba únicamente 9 dólares la hora. En este tiempo pasó por todo tipo de albergues para madres de bajos recursos y recibiendo los bajos bonos del gobierno, pero siempre con la voluntad de sacar a sus dos hijos adelante y con el sueño de convertirse en escritora.
Luego de superar los problemas de vivir el día a día con lo poco que tenía, logró hacerse de un préstamo estudiantil y obtuvo una Licenciatura en Inglés y Escritura Creativa por parte de la Universidad de Montana.
Esto la impulsó a escribir sus memorias y de esta forma alcanzar su sueño de ser escritora. Actualmente, Stephanie Land escribe para portales de internet como Vox o The Huffington Post.
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