Keylor Navas; un hombre de fe y perseverancia
El efecto Zidane no se hizo esperar. Se esperaba con expectación su primer once en esta segunda etapa al frente del Real Madrid, y el técnico no defraudó. Confió en la vieja guardia, en sus antiguos pretorianos, para hacer frente al Celta. Keylor Navas, Marcelo e Isco, en el once.
Para el meta, se trataba sólo de la cuarta titularidad en Liga. El tico no se colocaba bajo los palos de la puerta madridista en el torneo de la regularidad desde el pasado 26 de agosto de 2018, en la visita a Girona en Montilivi (1-4). En el partido siguiente, frente al Leganés, Julen Lopetegui decidía otorgar la titularidad a Thibaut Courtois, llegado al club blanco apenas un par de meses antes.
Keylor sí fue el portero del Madrid en la Copa, salvo en el partido de ida de cuartos ante el Girona, y parecía que la derrota ante el Barça en semis supondría el fin de la temporada para él. Pero la llegada de Zidane ha obrado un cambio inesperado a pesar del ‘toque’ del club a Courtois por su bajo rendimiento.
Tampoco era la titularidad de Marcelo una apuesta segura. Con Solari dejó de jugar incluso la Copa, que parecía reservada para él. Reguilón fue titular en la vuelta ante el Barça, refrendando la pérdida de posición del brasileño, que mucho antes se había visto relegado a la suplencia en la Liga.
El retorno de Zidane permite al segundo capitán recuperar estatus en una recta final de temporada decisiva en relación su continuidad en el Madrid.
Algo parecido cabe decir de Isco, aunque en su caso la situación era la más negra de todas. No sólo no entraba en los onces, sino incluso en las convocatorias.
Solari lo tuvo fácil con la lesión de espalda del malagueño, pero nunca ocultó que había muchos jugadores por delante de él en la rotación. En la víspera del partido, Zidane lo dejó claro:
«Yo sí voy a contar con Isco». Dicho y hecho. Isco, titular ante el Celta, algo que no sucedía desde el pasado 28 de octubre, día de la derrota por 5-1 ante el Barça en el Camp Nou, en el último partido de la era Lopetegui.