Impresionantes fotos aéreas muestran a Chicago petrificado por ola de frío ártico
El norte de Estados Unidos volvió a sufrir el jueves temperaturas polares que obligaron a las autoridades, por segundo día consecutivo, a cerrar escuelas, suspender vuelos y trenes, y abrir refugios de emergencia para los más vulnerables.
La ola de frío ártico, provocada por un viento polar que afecta a unas 60 millones de personas, ha dejado una docena de muertos, según un nuevo balance provisional. Las temperaturas cayeron incluso a -45°C en el norte del país.
La provisión de gas natural estaba bajo amenaza en Michigan y Minnesota, donde se pidió a los residentes reducir su consumo en la medida de lo posible, y tuberías de agua congelada se rompieron en Detroit y partes de Canadá.
Más de 2.300 vuelos internos e internacionales habían sido cancelados el jueves, según el sitio especializado FlightAware, y la compañía ferroviaria Amtrak esperaba empezar a reanudar los servicios tras cancelar todos los trenes el miércoles en Chicago.
En tanto, el Servicio Postal de Estados Unidos dijo que la distribución del correo continuaba suspendida el jueves en varios estados.
Se espera que las temperaturas bajo cero empiecen a remontar este viernes, pero el frío no cederá rápidamente en al menos 12 estados.
«Aún no hemos terminado. Tenemos otras 24 horas donde el clima estará en niveles peligrosos», dijo la gobernadora de Michigan, Gretchen Whitmer, en una conferencia de prensa.
«Las temperaturas comenzarán a moderarse lentamente mientras la masa de aire comienza a calentarse», dijo por su parte el Servicio Meteorológico Nacional.
En la región de los grandes lagos, estas condiciones meteorológicas poco habituales provocaron fenómenos naturales sorprendentes.
En Chicago, el miércoles fue el segundo día más frío jamás recordado, donde residentes dijeron escuchar «terremotos de hielo». Según el canal local WGN, probablemente este fenómeno haya sido consecuencia de agua congelada.
– «Extremo y peligroso» –
Funcionarios en múltiples estados advirtieron que las temperaturas debían ser tomadas en serio, ante riesgos de hipotermia y congelamiento con solo minutos de exposición.
«Hemos pasado de la nieve a las temperaturas heladas y un viento frío«, dijo el alcalde deChicago Rahm Emanuel en una conferencia de prensa. «Con más nieve en camino, todavía no estamos fuera de peligro», dijo.