Sujeto despertó a su pareja antes de matarla a machetazos
Al hombre, que fue condenado a 20 años de prisión, no le importó que su hijo durmiera en la habitación contigua al momento del crimen.
Jéssica María Sánchez Fuentes y Freddy Palma Segura tenían una relación aparentemente cargada de celos. Los pleitos y golpes eran una constante en su vivienda ubicada en Valle Azul de Agua Buena, en San Vito de Coto Brus, Puntarenas.
Poco podía hacer Jéssica para no despertar la furia de su pareja, sin embargo, ella tenía la esperanza de que las cosas iban a cambiar en algún momento incluso nunca le contó a su madre la situación complicada que vivía en su hogar.
Así pasaron siete años, hasta que un momento de furia de un hombre violento apagó la ilusión de Jéssica , quien al momento de fallecer tenía 34 años.
De acuerdo con la sentencia N° 253-2020 del Tribunal de Corredores, de octubre del año anterior y publicada por diario La Nación, el asesinato de Jéssica ocurrió de la siguiente manera.
Eran las 9 p. m. del 5 de agosto del 2019. Jéssica y su pareja descansaban en su habitación, mientras que en el cuarto al lado dormían sus dos hijos de 5 y 11 años.
Sin ningún motivo, Palma, se levantó de la cama, salió del cuarto, tomó un machete y regresó minutos después a donde descansaba Jéssica. Con la intención de levantarla, golpeó la cama con el machete y después le dijo: “¿Esto es lo que querías?”.
De inmediato y sin dar espacio a nada, Freddy Palma la cortó muchísimas veces en su cara, hombros y brazos. No conforme con eso, la degolló.
Palma, fue detenido esa misma noche a escasos diez metros de la vivienda donde ocurrió el crimen poco después de que él mismo le confesara a otro hijo suyo lo sucedido.
El proceso penal continuó, en medio de este, Palma aceptó los cargos por feminicidio y se acogió a un proceso abreviado. El Tribunal le impuso 20 años de prisión.
Una vez que se le dictó la sentencia a Palma, el Tribunal le reprochó su accionar. El juez Luis Guillermo Miranda, lo recriminó por cometer el crimen estando dos menores de edad en una habitación contigua.
Miranda, le indicó a Palma que la presencia de los menores poco le importó, lo que prueba el dolo de su conducta.
“Con su actuar delictivo realizó lo contrario, sin importarle en lo más mínimo el hecho de haber procreado un hijo con la acá ofendida, no le importaron los años de convivencia que tenía con la aquí ofendida, teniendo total desprecio por la vida de la misma, sobre todo como se dieron los hechos”, aseguró el jurista.
“Se trata de la mujer por la que medió un sentimiento positivo de amor, que él debió honrar y respetar desde el momento en que inició su relación. No debió jamás procurar por la fuerza y la violencia seguir vinculado a ella y lo más lógico hubiese sido que si ya no existían lazos afectivos por parte de alguno, separarse y seguir cada uno con su vida y no como lo realizó el imputado”, agregó.
El juez indicó que a Palma no le importó que Jéssica fuera la jefa de hogar y que tenía más hijos además del que había procreado con él: “Sin mediar ningún tipo de sentimiento y sabiendo que Jéssica era la madre de uno de sus hijos, decidió acabar con su vida, dejando al menor desprotegido, sin su madre. Los niños perdieron a su madre a causa de un hombre que debía de amarla y respetarla”.
Sobre la sentencia, el juez Miranda aseguró que tal vez el tiempo que Palma pasará en prisión le ayude para que reconstruya su vida: “De manera respetuosa no solo para con el ordenamiento jurídico, sino también para con todo ser humano y principalmente las mujeres”.