La conjunción de Júpiter y Saturno: las claves de la nueva era que comienza en 2021
Será la conjunción más importante de las últimas décadas.
El próximo 21 de diciembre del 2020 se producirá una conjunción muy importante, la de Júpiter con Saturno en Acuario.
Dentro de los «fenómenos» del cielo, las conjunciones son los aspectos más importantes ya que representan el inicio de los ciclos. Un ciclo comienza con la conjunción entre dos astros y se produce cuando el planeta más rápido alcanza al más lento.
A partir de entonces, todos los aspectos posteriores entre ambos planetas hasta la nueva conjunción se interpretarán con respecto al momento de la conjunción.
La «gran conjunción»
Los sabios de la antigüedad consideraban que las conjunciones planetarias más importantes eran aquellas que se producían entre los planetas superiores: Marte, Júpiter y Saturno.
Entre ellas, la más importante es la de Júpiter con Saturno, por tratarse de los astros visibles más lentos -en la antigüedad llamados “cronocratores”, o sea, planetas que marcan tiempos-.
Dicen los astrólogos magrebíes: “Cada una de las figuras de estas conjunciones tiene una naturaleza, que da lugar a un juicio particular y una propiedad que la distingue de las demás. La de Júpiter con Saturno es el traspaso del poder de un pueblo al otro y la desaparición de las religiones de las naciones”.
Las conjunciones de estos dos planetas forman a su vez un ciclo de conjunciones. Su ciclo combinado influye sobre períodos muy largos, de aproximadamente 240 años en el mismo elemento. Cada 20 años hay una conjunción entre ellos, y a veces, durante ese período se intercalan conjunciones de un elemento distinto.
Cuando se trata del próximo elemento, son precursores del nuevo ciclo, si repite el elemento anterior, indicará la repetición de una misma tendencia.
Cada ciclo astrológico comprende 40 conjunciones en teoría, en la práctica oscilan alrededor de ese número. Tenemos que saber que cada ciclo de Júpiter con Saturno genera un milenio de 960 años divididos en 4 períodos de 240 años (también hay oscilación) que responden al siguiente orden: Fuego, Tierra, Aire, Agua.
En 1802 se produjo la primera conjunción precursora de en Tierra; en 1821 la última en Fuego; y a partir de 1842 y durante todo el siglo XX hemos visto que las conjunciones de Júpiter con Saturno se han producido en signos de Tierra.
En 1901 en Capricornio; en 1921 en Tauro; en 1961 nuevamente en Capricornio; en 1981 en Libra (la fase anunciadora del elemento Aire); y en el 2020 entraremos de lleno en el ciclo de ese elemento con Acuario hasta 2199.
La última conjunción de Saturno con Júpiter (la que se produjo en el año 2000 en el grado 22º 42’ del signo de Tauro) será también la última en un signo de Tierra. Finaliza, por lo tanto, un ciclo en un elemento, así como analógicamente deberá finalizar aquello que representa.
Bajo un signo de aire: el nuevo orden mundial
Los signos de Tierra están relacionados con lo concreto, lo práctico, lo materialista, lo tangible; con los bienes, la productividad, la economía y la propiedad.
Los signos de Aire son signos humanos, sociales, de asociación e intercambio, de comunicaciones, ciencias, artes y relaciones. Tenemos derecho a pensar que a partir de la conjunción del año 2020 el mundo tendrá una estructura socioeconómica diferente, que las ciencias, la comunicación (que ya ha sufrido un notable cambio), las relaciones sociales e, incluso, la sociedad probablemente se organicen y sean vistas de otra forma.
El signo de acuario es un signo de Aire asociado con la hermandad y la universalidad y, también, con las rutas sobre todo ferroviarias, con la industria del frío, con el ferrocarril, con la aviación y con la electricidad.
Acuario es una excelente ubicación para Saturno que, en ese signo se comporta de manera intelectual, científica y organizada. Los planetas presentes en Acuario son influenciados por un espíritu cientificista, que aplica métodos nuevos en el campo de su significación como puede ser la electrónica, la aeronáutica, y toda labor intelectual, e indica progresos incluso revolucionarios.
Las dotes creativas propias de Acuario se encuentran apoyadas por el método saturnino. Existe inquietud por la investigación y los nuevos descubrimientos, con tendencia a la reserva y al desapego emocional.
Desafortunadamente, cuando se lleva al exceso, esta combinación puede ser manifestada como frialdad, distancia y o indiferencia.
Saturno, que es uno de los regentes de la triplicidad de Aire, va a primar sobre Júpiter durante todo el período Aire, por lo cual privilegiará el orden y la estructura a la expansión y la comodidad.
Por otra parte, de acuerdo con la Astrología Tradicional, el cambio de elemento también indica un cambio en el orden mundial y el eje del mundo pasa de occidente a oriente.
Durante el tránsito de Saturno en Acuario entre 1962 y 1964 se realizó la primera transmisión audiovisual transatlántica. En el período siguiente (1991-1994), fuimos testigos del nacimiento de Internet y el fin de la URSS.
Durante la conjunción predecesora de Júpiter y Saturno en Libra (Aire, en 1980) se desarrolló internet, surgieron importantes adelantos científicos y comenzó el desarrollo de Silicon Valley.
Por lo tanto, tendremos que asistir a nivel mundial a un mayor desarrollo de la tecnología y posiblemente una organización (Saturno) en las relaciones (Acuario).
En conclusión: las conjunciones de Júpiter con Saturno corresponden a ciclos socioeconómicos, religiosos, estructurales, políticos e incluso climáticos que indican cambios profundos y universales. Y eso es lo que comenzaremos a vivir a partir de 2021.